Alfabetización en salud
- Roy McKenzie.
- 8 abr
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Mientras el sistema de salud colombiano implementa reformas estructurales, una estrategia silenciosa pero potencialmente transformadora emerge en las Unidades Primarias de Salud: la alfabetización del propio personal sanitario. Un análisis de su impacto, desafíos y oportunidades.
La alfabetización en salud ha sido tradicionalmente concebida como un desafío que afecta a pacientes, definida por la OMS como "las habilidades cognitivas y sociales que determinan la motivación y capacidad de los individuos para acceder, entender y utilizar información que promueva y mantenga una buena salud". Sin embargo, existe una dimensión crítica y menos estudiada: la alfabetización del propio personal sanitario. En las Unidades Primarias de Salud (UPS) de Colombia, primera línea de contacto con el sistema, este fenómeno adquiere relevancia especial. Los profesionales enfrentan el doble desafío de mantenerse actualizados en un campo que evoluciona aceleradamente mientras deben comunicar información compleja a poblaciones diversas.

Las brechas invisibles en el conocimiento sanitario
Las evaluaciones internas realizadas en diversas UPS colombianas revelan que hasta un 40% del personal sanitario presenta dificultades significativas para interpretar correctamente nuevas guías clínicas o implementar protocolos basados en evidencia reciente. Según un estudio publicado en la Revista Panamericana de Salud Pública, estas brechas se amplían en zonas rurales, donde el acceso a educación continua es limitado. El fenómeno no es exclusivo de Colombia: un análisis comparativo publicado en BMJ Global Health encontró patrones similares en varios países latinoamericanos, donde la actualización de conocimientos está obstaculizada por factores estructurales como sobrecarga laboral, recursos limitados para capacitación y la velocidad con que evoluciona la evidencia científica.
Las UPS enfrentan lo que podríamos denominar "la paradoja del intermediario desinformado": profesionales encargados de educar a la población sobre salud que, paradójicamente, pueden carecer de herramientas informativas actualizadas o habilidades pedagógicas para transmitirlas efectivamente. Un estudio publicado en The Lancet Global Health documentó cómo esta paradoja contribuye a la persistencia de prácticas desactualizadas en atención primaria, estimando que entre la publicación de nueva evidencia y su implementación efectiva en el nivel primario pueden transcurrir entre 5 y 17 años, periodo que se acorta significativamente cuando existen programas estructurados de alfabetización sanitaria para el personal.
Alfabetización como estrategia transformadora
Las experiencias piloto desarrolladas en el departamento de Antioquia demuestran el potencial transformador de invertir en alfabetización del personal sanitario. El programa "UPS que Aprenden", implementado en 23 unidades primarias entre 2018 y 2022, desarrolló un modelo integral que aborda tres dimensiones clave: actualización de conocimientos clínicos, fortalecimiento de habilidades comunicativas y alfabetización digital. Los resultados, documentados en un informe del Ministerio de Salud, evidenciaron mejoras sustanciales: reducción del 27% en errores de prescripción, aumento del 45% en adherencia a guías de práctica clínica y mejora del 38% en la satisfacción reportada por los usuarios. El análisis costo-beneficio estimó un retorno de 4,3 pesos por cada peso invertido en el programa, principalmente por reducción de complicaciones prevenibles y uso más eficiente de recursos diagnósticos.
La pandemia de COVID-19 aceleró la implementación de estrategias digitales de alfabetización. Un análisis publicado en JAMA Network Open sobre programas similares en diversos contextos encontró que las plataformas digitales que combinan microaprendizaje (sesiones breves y enfocadas), comunidades de práctica virtuales y mentoría remota logran tasas de retención de conocimiento significativamente mayores que los modelos tradicionales de capacitación. En Colombia, la iniciativa "Telesalud para Equipos Primarios" logró conectar UPS remotas con centros de referencia, facilitando no solo consultas especializadas sino también sesiones regulares de actualización clínica para el personal.
A pesar de estos avances, persisten obstáculos significativos. Un estudio cualitativo publicado en BMC Health Services Research identificó barreras estructurales como la alta rotación del personal en las UPS (cercana al 35% anual en algunas regiones), la fragmentación del sistema de salud que dificulta el seguimiento de procesos formativos, y la ausencia de incentivos claros para la actualización profesional. Adicionalmente, las brechas digitales siguen siendo un limitante importante: datos del Ministerio de TIC indican que aproximadamente un 30% de las UPS rurales carecen de conectividad adecuada para implementar estrategias digitales de alfabetización.
El rol de las universidades y la responsabilidad compartida
Las facultades de ciencias de la salud tienen un papel crucial pero frecuentemente descuidado en este escenario. Un análisis de las mallas curriculares de diez facultades de medicina colombianas, publicado en Educación Médica, encontró que menos del 20% incorporan formación específica sobre habilidades de comunicación en salud, alfabetización sanitaria o estrategias pedagógicas para la educación de pacientes. Esta desconexión entre formación académica y necesidades prácticas contribuye a perpetuar el problema. Experiencias como la de la Universidad de Antioquia, que ha reformulado sus programas para incluir rotaciones específicas en alfabetización sanitaria comunitaria, muestran caminos alternativos prometedores.
La evidencia revisada sugiere que la alfabetización del personal sanitario en las UPS constituye una estrategia con elevado potencial transformador, pero insuficientemente priorizada en las políticas de fortalecimiento del sistema. Los resultados de programas piloto demuestran que, cuando se implementa sistemáticamente, esta estrategia genera retornos significativos en términos de calidad asistencial, eficiencia del sistema y resultados en salud.
El fortalecimiento de la alfabetización sanitaria del personal de las UPS requiere un abordaje integral que trascienda la simple capacitación técnica, incorporando dimensiones como habilidades comunicativas, competencias digitales y capacidad pedagógica. Asimismo, demanda articulación entre actores diversos: instituciones prestadoras, universidades, autoridades sanitarias y organizaciones profesionales.
En un contexto donde la brecha entre el conocimiento científico y su aplicación práctica sigue siendo uno de los principales obstáculos para mejorar los resultados en salud, invertir en alfabetización del personal sanitario representa no un lujo sino una necesidad estratégica. La verdadera transformación del sistema de salud colombiano, particularmente en el nivel primario, dependerá en gran medida de nuestra capacidad para construir equipos no solo técnicamente competentes sino también alfabetizados en las múltiples dimensiones que la salud contemporánea exige.
Referencias
Organización Mundial de la Salud. (2021). Alfabetización sanitaria: Los hechos sólidos. OMS.
Gómez-Aristizábal, L., Ávila-Morales, J., & Martínez-Durán, S. (2020). Brechas en la implementación de guías clínicas en atención primaria en Colombia. Revista Panamericana de Salud Pública, 44, e56.
Borja-Aburto, V. H., González-Block, M. A., & Reyes-Morales, H. (2022). Implementación de evidencia en servicios de atención primaria: análisis comparativo en América Latina. BMJ Global Health, 7(4), e007185.
Ministerio de Salud y Protección Social. (2023). Resultados del programa "UPS que Aprenden" 2018-2022. MinSalud Colombia.
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